miércoles, 30 de marzo de 2011

A tocar la nariz del rey

Érase una vez un chico que tenia una rara meta, tocarle la nariz al rey. Todo el mundo le decía que no lo hiciera que era peligroso pero el a su bola.
Al momento ya estaba tocando narices a gente importatnte: ministros, secretarios.
El ternía una libreta en la que apuntaba todas las narices que había tocado. (De tantas veces que había tocado las narices se tubo que comprar una libreta más grande por que no le cabian en la pequeña).
Al final llegó el gran día que pudo tocar la nariz al rey. Al rey le parecio una forma más moderna de acer una reberencía.

Iván


Iván, debes fijarte un poco más a la hora de no hacer faltas.